Plataforma de salud mental busca combatir la desinformación en las redes sociales

  • Antonio Salinas, psicólogo y conector del área de la agrupación, indica que es relevante contar con una plataforma donde los estudiantes puedan encontrar contenidos de salud mental fidedignos y claros.
  • Mientras elaboran el sitio web, han detectado que muchos jóvenes averiguan sobre las patologías y las estrategias de autocuidado, por redes sociales como Tiktok o Instagram.

La Red de Salud Digital de las Universidades del Estado (RSDUE), conformada por catorce establecimientos, está desarrollando una plataforma de salud mental para sus estudiantes. La idea es que puedan recibir contenido fidedigno y en base a evidencia científica y consenso de expertos, lo que permitirá combatir la desinformación en un área tan sensible. Antonio Salinas, psicólogo y conector de la mesa de salud mental, indica que es relevante contar con una plataforma fácil de acceder y confiable.

Mientras se elabora el sitio web, él junto al equipo compuesto por representantes de las 14 universidades, han detectado que muchos jóvenes averiguan sobre las patologías asociadas y las estrategias de autocuidado, por redes sociales como Tiktok o Instagram. Esto lo consideran algo complejo, ya que mucha información que ahí se comparte no está regulada ni aprobada por expertos para su difusión, lo que puede devenir en problemas para los receptores.

En 2022, la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó un estudio donde especificó que las repercusiones de la desinformación, sobre todo, en las redes sociales eran las causantes de efectos negativos como un “aumento en la interpretación errónea del conocimiento científico, polarización de opiniones, aumento del miedo y el pánico o disminución del acceso a la atención médica”.

El proyecto digital que busca promover el cuidado y prevenir la emergencia de problemas de este tipo, se está realizando, a partir del trabajo de un grupo de profesionales del sector sanitario, como psicólogos, psiquiatras, terapeutas ocupacionales, trabajadores sociales, salubristas, entre otros. Éste va a ser un lugar donde se conecten todas las instituciones, ya que los planificadores quieren aunar criterios y combatir la fragmentación.

Actualmente en el link, www.rsdue.cl, se encuentra un mapa con todas las instituciones de enseñanza donde al hacer clic, se puede visualizar el contacto de las unidades de atención. “Cuando tengamos lanzado el sitio queremos agregarle datos territoriales, es decir, si ingreso con mi usuario, además de mostrarme la región donde estoy, me entregará datos sobre los centros de atención que hay, si hay alguno especializado, un hospital u otro, y darme los pasos para pedir ayuda”, señala Salinas. Y añade que esto complementa los canales digitales como “Salud Responde”.

Caracterización y pandemia

Para planificar el desarrollo de este programa se realizó una caracterización de los estudiantes de la RSDUE (2023), donde se entregan detalles sobre la prevalencia y motivos de consulta relacionados con salud mental. En el documento se explica que revisaron estudios chilenos sobre el tema, incluyendo una revisión de alcance con metaanálisis. Entre los resultados de este último estudio, se identificó que los jóvenes universitarios presentaban rangos entre 22,9% a 40,7% para malestar psicológico; de 16,5% a 38,8% para síntomas depresivos, y de 16,5% a 23,7% para síntomas ansiosos. (Martínez et al., 2021).

También se señala uno (Valdés et al. 2022) realizado durante el confinamiento producto de la pandemia del Covid-19, en el cual se concluye una alta prevalencia de diversos problemas de salud mental. En el detalle, se encontró un 54,6% para estrés; 37,1% para depresión; y 37,9% para ansiedad. Además, se reportó riesgo suicida en el 20,4%. La revisión dio cuenta de la transversalidad de estos problemas en este grupo etario, lo que “fundamentó el desafío ético y práctico de desarrollar acciones de promoción y prevención, que sean escalables y costo eficientes”, según detallaron.

Avances

Salinas destaca que ya están en la etapa final del diseño y prontos a comenzar el desarrollo de la nueva tecnología educativa. Y comenta que se han seguido generando datos, tanto desde el ámbito académico, como del sanitario. También explica que se han extendido vínculos de colaboración con otras entidades. “Por ejemplo, hemos ampliado nuestra colaboración con el Núcleo Milenio Imhay, quienes nos están apoyando con algunos temas de su experticia, también estamos buscando alianzas con grupos que tienen mucho saber y experiencia en temas específicos, como círculo polar en el tema de bipolaridad,”, detalla.

Existe una parrilla de contenidos consensuada, que proviene de dos fuentes principales: la literatura científica y la experiencia de los profesionales que conforman y trabajan en la RSDUE. “En base a esto hicimos un set con temas donde hemos ido priorizando los que consideramos más relevantes, debido a la prevalencia, y también debido al impacto positivo que pueden tener en los estudiantes, apuntamos a fortalecer la alfabetización en salud mental, y que los estudiantes que lo requieran, puedan aprender a conocer mejor sus emociones, cultivar buenos hábitos y buscar ayuda cuando es requerido”, relata

Grupos de trabajo

Los encargados han realizado grupos de trabajo en distintas universidades con estudiantes y profesionales de las universidades, con el objetivo de que tanto los alumnos como las autoridades les ayudaran a determinar los antecedentes, características y funcionalidades más importantes que debía contener la plataforma. Salinas detalla que se les mostró a los asistentes algunos sistemas similares, ya en uso, de Chile y EE.UU. “En base a eso completaron varias tareas y nos indicaron que era lo que más les gustaba, que cambiarían, que les llamaba la atención, que les motivaría también a ocuparla”, detalla.

Salinas da cuenta de que ha habido una muy buena participación en dichas jornadas, con la gente ha sido muy activa, aportando ideas para el equipo de trabajo, lo que ha ido generando espacios de trabajo constructivos. El psicólogo explica que la web debe llegar a toda la comunidad y que algunas investigaciones demuestran que cuando los alumnos acceden a este tipo de lugares virtuales, navegan poco por ellos. “Por eso queremos hacer una campaña continua y activa, para que la gente sepa de su existencia y se motive a entrar”, detalla. En las conversaciones se ha intentado ver qué fomentaría el uso de la plataforma, lo que también ha sido fructífero, según el experto.

Formatos

Para el sistema se están recopilando recursos que ya están creados y validados, sumados a otros que construyó el equipo de la Red. “Tenemos algunos contenidos de las universidades e instituciones afines, que vamos a poder desplegar o enlazarlos”, destaca. Además del multimedia, comenta que habrá textos explicativos que funcionarán de la forma más interactiva posible. “Queremos generar una positiva experiencia de usuario, y ofrecer contenidos en un formato cercano, no enciclopédico o de manual de salud mental, sin sacrificar la evidencia científica”, detalla.

Uno de los espacios que se desarrollaron y que ya puede verse se llama ¡Cuidando tu salud mental!, donde están recopilados consejos y cápsulas informativas, con participación de los mismos alumnos. Además, existen otros links externos, por ejemplo, al programa Hablemos de Todo del Injuv, en el cual se pueden hacer consultas con un sicólogo, y al que pueden acceder jóvenes entre 15 y 29 años; y uno del ministerio de Salud (Minsal) para prevenir el suicidio apoyar en la prevención del suicidio, al que se accede discando el *4141.

Otra idea que tienen es entregar ciertos datos en formato de audio y colocarlos en alguna playlist estilo Spotify, para que puedan interiorizarse en dichas temáticas en sus momentos libres, “cuando se movilizan en Metro, micro o cualquier lugar donde no sea tan fácil sacar el teléfono y leer”, indica. (Por Cristián Yáñez W. Agencia Inés Llambías Comunicaciones)

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